¿Alguna vez has abierto el PC de alguien solo para asustarte de la tal cantidad de polvo que contiene dentro? No solo es algo feo, es peor que eso, puede reducir la eficacia del ordenador y en casos extremos dañar el hardware.
Un poquito de polvo no va a dañar el hardware, pero si no lo revisas, unas pocas partículas pueden transformarse en algo peor antes que te des cuenta, como fallar la ventilación y quemar tu tarjeta gráfica o tu CPU y eso no es bueno.
¿Así que es lo que deberíamos hacer? Como dice el dicho, más vale prevenir que curar. O si lo prefieres, una buena ofensiva es una buena defensa. De igual manera, el punto es prevenir el polvo de que entre en nuestro sistema.
Hoy en día existen filtros para los ventiladores, como el diseño de Fractal el Define R5, o el S340 Elite de NZXT, o el Dark Base Pro 900 de Be Quiet!, and so forth. Hay muchas opciones en la red, así que a buscar.
Quizás prefieras hacerlo por tu cuenta a lo vieja escuela, y es limpiar tu máquina de vez en cuando, con una brocha suave y una aspiradora. Recomendamos mantenerlo alejado del suelo, así cogerá menos polvo, si tienes una mascota también lo evitaría. Si fumas, evita hacerlo cerca de tu PC. Los PCs más sucios son los de los fumadores.
Para limpiarlo, desconecta todo y sácalo de tu casa, así el polvo no vuelve dentro.
Recordad, la limpieza es una parte importante del mantenimiento del equipo, no solo formatear de vez en cuando.